El COVID-19 en Chile anotó, nuevamente, los peores números desde que se inició la emergencia sanitaria, luego que el gobierno informara que nuestro país está muy cerca de superar los 50.000 contagiados.
Así lo dio a conocer el ministro de Salud, Jaime Mañalich, quien reportó que en las últimas 24 horas se sumaron 3.520 nuevos contagiados, la cifra más alta desde iniciada la crisis, y de los cuales, 3.099 tienen síntomas y sólo 421 son asintomáticos.
El número de infectados totales en nuestro país alcanzó los 49.579 pacientes, confirmando que el aumento de casos es lo que ha provocado el colapso de algunos hospitales de la Región Metropolitana, como El Pino de San Bernardo y San José de Independencia.
Pero esa no fue la única mala noticia que entregó Mañalich, pues los decesos también alcanzaron un récord al sumar 31 personas, de las cuales, el ministro dijo que todas eran de la capital.
“Mayoritariamente eran de la tercera edad y con enfermedades de base significativas, al punto que en ellos hubo limitación de tratamientos y no estuvieron en una UCI”, argumentó.
Las muertes sumaron 509 y nuevamente se hizo hincapié en que la Región Metropolitana aporta gran parte de esa cifra.
Finalmente, Jaime Mañalich se refirió a los hechos ocurridos este lunes en El Bosque al decir que “estamos viendo lo que denominamos una pandemia social. Produce pérdida de empleos, falta de recursos y lo peor, produce hambre. Por eso el presidente está tomando una serie de medidas para que el hambre no golpee a los más desposeídos”.
“Este es un momento donde todos debemos sumar. La crisis sanitaria y social que vivimos no tiene precedentes en Chile, es por eso que hay que dimensionar adecuadamente cuál es el desafío que enfrentamos y hacerle frente, todos unidos”, cerró.